Antes de realizar la sesión, al
hablar con el/la modelo, hay que saber muy bien cómo quiere esa sesión de
fotos, según la temática podremos orientarle a elegir y llegar a un acuerdo
entre ambos. Pero, la cosa se complica cuando el fotógrafo tiene que elegir el
tema, el vestuario, el ambiente y las luces. La mayoría de veces pensamos que
las fotos en un estudio pueden quedar más ‘profesionales’ que en aire libre,
cosa que no es nada cierta ya que no tienen ninguna relación.
Las ventajas de trabajar en un
estudio son muy claras, pueden realizarse en cualquier estación y el vestuario
puede ser tanto de verano como de invierno aunque no haga ni frio ni calor (ya
que el local estará climatizado y por tanto podremos poner la temperatura
perfecta). También hay que tener en cuenta que pueden ser fotos más personales
en cuanto a desnudos o semidesnudos, ya que no habrá gente que nos pueda
observar. Pero, también hay distintos inconvenientes, por ejemplo, que no hay
gran variedad de fondos (solo de los que disponga el estudio) y por tanto, hay
que tener mucha imaginación o saldrían fotografías casi idénticas. En cambio,
esto no nos pasa en aire libre, ya que podremos elegir en un bosque, un jardín,
una playa, etc… Y esto conlleva que según la temática habrá que elegir un sitio
u otro. Hay que tener en cuenta la estación en la que estamos y por tanto,
utilizar el vestuario adecuado. También, puede haber probabilidad de que llueva
y si no estaba pensado, puede estropear la sesión. En cuanto a las luces no
puede haber muchos cambios ya que son luces ambientales. También hay que tener
en cuenta la hora en que esté programada la sesión ya que esto hará cambiar las
luces y puede dar un toque distinto a esta sesión. A continuación os dejo esta fotografia realizada en un estudio:
Estas son unas cuantas opiniones, yo seguiría esos pasos para poder elegir el sitio perfecto para hacer una sesión. También se pueden juntar ambos sitios y hacer una sesión más compleja.
Espero que os haya gustado, ¡nos
vemos la semana que viene!